A raíz de una una noticia aparecida en un periódico digital, allá por octubre de 2007, sobre la denuncia presentada por un médico contra dos agentes de la policía local por abuso de autoridad, se inició un frenético debate entre los lectores que ha llegado hasta fechas muy recientes. Bueno, llamar frenético al debate es una licencia que me permito, ya que en más de dos años se han producido treinta y nueve intervenciones de los lectores, lo que nos da una media de 1,39 comentarios al mes.
Éste, el de los abusos de autoridad de los agentes de policía, especialmente de la policía local, es un tema recurrente que se repite constantemente en cualquier medio escrito, especialmente en los portales informativos de internet que facilitan a los lectores la posibilidad de comentar las noticias. La singularidad en este caso es que, un hecho anecdótico ocurrido hace más de dos años, se convierte así en un tema de discusión que se prolonga indefinidamente en el tiempo, como si hubiera un interés especial en mantener candente un tema como este, que no pasó de ser, eso, una simple anécdota en un océano de intervenciones policiales.
Uno de los últimos comentaristas contaba que había dejado su vehículo estacionado en doble fila en una calle del pueblo en el que trabaja. En ese instante se acerca un policía local no conocido por el comentarista, quien, sin tan siquiera saludar, le pregunta, a bocajarro, si conoce la señal y añade, a continuación, que está harto de gente como él y le conmina de malas maneras a que quite el vehículo de donde lo había dejado estacionado. La multa no se la llegó a poner, el policía se la perdonó por esa vez. A pesar de ello, lo que más indignó al comentarista fue que el agente pasó de denunciar a una furgoneta que estaba estacionada más adelante y en la misma situación.
-“Por Dios, qué y dónde enseñan a esta gente, a ver si sabe lo que es la prevaricación por omisión, el abuso de autoridad y los buenos modales. A mi quien me tiene que perdonar es mi padre y no él. Que llegue, me diga buenas noches, ¿sabe usted que esta estacionado en un lugar prohibido?, me clave 90 euros, me ayude a reincorporarme a la circulación y luego se vaya a perdonarle la vida a sus hijos.
– Es curioso lo que dices refiriendote a los policías locales: «¿que le ensañan a esta gente?. Yo te lo contesto, a «esta gente» les enseñan lo mismo que le enseñan a cualquier agente de policía de este país. Que haya un maleducado en la policía local de un pueblo no te da derecho a preguntar eso de «qué le enseñan a esta gente».
Algunos creen que la buena educación es deficiente en unos cuerpos de seguridad y esplendida en otros. Como si la buena educación dependiera del uniforme que se viste, cuando lo cierto es que hay impresentables en todos los cuerpos y en todas las profesiones. Si algo justifica, si es que admitiera justificación este tipo de cosas, sería el tratar de entender que los municipales tienen un trato cotidiano con los ciudadanos (son los que ponen multas en los pueblos y en las ciudades) seguramente mayor que en otros cuerpos y eso genera roces y enfrentamientos constantes y, por tanto, mayores probabilidades que este tipo de comportamientos se presente.
El problema, el gran problema y la clave de bóveda, está en la generalización, entre otras cosas porque cuando se generaliza se está cometiendo una auténtica injusticia. Alguien que no haya estado presente en un hecho concreto lo tiene complicado para realizar comentarios que aporten algo de luz y, en la mayoría de las ocasiones, solo dispondremos de la versión que ofrezca el ciudadano que haya pasado por uno de estos tragos y que encuentra en estos foros una válvula de escape a su indignación.
Así es, indeseables hay en todas las profesiones y esto, que es una obviedad, parece ser que hay que estar repitiéndolo constantemente cuando se habla de la policía local. Parece como si hubiera que estar justificando algo que no hay que justificar, por ser un hecho evidente que nos afecta o nos puede afectar a todos y en cualquier ámbito laboral.
La prepotencia y determinadas formas no correctas de dirigirse al ciudadano tiene su origen y va con el carácter y la educación de cada cual, y esa “educación” no es absoluta, es decir, no es se tiene o se carece de educación, sino que el comportamiento de cada uno, la respuesta que se da en cada momento depende muy mucho de las circunstancias de cada momento. Una de esas circunstancias, que se dan o se pueden dar, es el trato continuo con la población (no estoy hablando del trato con delincuentes sino del trato con ciudadanos corrientes). No tiene nada que ver, en absoluto, la multa impuesta a un conductor en una carretera, donde únicamente suelen encontrarse el guardia y el conductor; con la multa impuesta en una calle concurrida de cualquier pueblo o ciudad, donde además del guardia y el conductor suelen estar presentes curiosos, gente loquita por sacar una foto o un video de la intervención, gente que le gusta entrometerse en todo, etc. En el primer escenario, el conductor normalmente (no siempre será así) tratará de comportarse con la mayor educación posible por encontrarse entre comillas “indefenso” y un poco a merced de las circunstancias. En el segundo escenario, el público espectador muy probablemente hará o facilitará que el conductor se crezca y monte un pollo amparándose en el apoyo que posiblemente encuentre entre los espectadores. Son dos escenarios totalmente distintos que van a condicionar tanto el comportamiento del conductor como del agente.
El policía no solo está para poner multas, también puede y debe cumplir una función pedagógica (función que también puede cumplir la multa). Por tanto, si en lugar de denunciar, te advierte de que ese comportamiento no es correcto, pero que no te va a denunciar por esta vez, creo que cumple con esa labor pedagógica.
Las generalizaciones son injustas y cuando alguien se pregunta: “¿pero que le enseñan a esta gente?”, está cayendo en una generalización injusta. Hoy en día, al menos en Andalucía, los miembros de las policías locales reciben una formación básica adecuada. Para ser policía local no solo es necesario tener bachiller superior o equivalente y aprobar la oposición, sino que el candidato a policía deberá pasar 9 meses de formación en la Escuela de Seguridad Pública. Pero la formación no garantiza la educación y el trato correcto.
29/04/14 at 9:50 am
Esto me pasó ayer a mí. He tenido la mala suerte de ser protagonista de como dos agentes de la policía local, los cuales no han querido identificarse, me han parado alegando que yo estaba hablando con el móvil mientras conducía. No era verdad, por lo cual les he dicho que no he hablado en ningún momento con el móvil. No hay ninguna llamada, y las faltas de respeto de los dos jóvenes policías eran dignas de ser grabadas. Me han multado con 200 euros por algo que no he hecho. Me han gritado ¡¡NO SALGAS DEL COCHE!!! cuando tan sólo he apoyado mi pie en la acera para darles los papeles, me han vuelto a gritar como si fuera una delincuente cuando me disponía a hacerles razonar. Yo les decía, sabéis que estáis equivocados y que no he hablado por el móvil y me gritaban y me trataban como si fuera una basura negándose a razonar. Toda esta injusticia ha hecho que comenzara un brote de ansiedad que en mi caso es muy grave ya que me encuentro en las primeras semanas de embarazo. He estado toda la noche sin dormir y ahora tengo unos enormes dolores en el vientre bajo y sangro un poquito. Me gustaría que quedara constancia de todo esto de alguna manera, ya que si pierdo el bebé querría que las personas que me trataron tan mal se responsabilizasen de ello. Estaban fuera de sí, intuyo, que porque se dieron cuenta de que no tenían ninguna razón para pararme y aprovecharon su autoridad para sacar su agresividad, su hostilidad contra mí a parte del trato infrahumano que he recibido, con el fin de amedrentarme y que firmara la denuncia. Por supuesto, no la he firmado porque lo que hay escrito en ella no es cierto. No voy a firmar algo que no es verdad. Mi palabra contra la suya, lo sé, esto es difícilisimo de comprobar. Aunque creo que la mayoría de los mortales, si cometemos una infracción y tienen razón la asumimos, pero si no tienen razón tratas de defenderte como he hecho yo y el resultado ha sido una agresividad verbal que ha desatado una ansiedad que jamás había vivido. No han querido darme el número de placa, no me han dicho en que comisaría trabajaban. Sé que voy a tener que pagar por algo que no he hecho.
Todo el mundo me dice que se van a ir de rositas, pero creo que un policía local no puede mentir, abusar de su poder más allá de hacer cumplir las normas societales. Me he sentido muy humillada y eso no lo arregla un perdón. Para colmo, me han desatado una ansiedad que ha hecho que mi embarazo pueda tener consecuencias graves. Por favor, si pudieran decirme qué puedo hacer, fui a la comisaría de Puerto Venecia en Zaragoza con una ansiedad increible justo llegué a las 14.00 h que era cuando cerraban, no me atendieron y hoy de dolores no puedo ni moverme.
Muchas gracias
7/05/15 at 9:00 pm
La verdad es que algunos policías: sobretodo municipal. Tienen unos comportamientos poco educados.
No saben que nosotros los ciudadanos les pagamos el sueldo y que deben de ser nuestros servidores.
Alguno de ellos pueden insultarte ,maltratarte,Te provocan con tono amenazante ; pero como tu hagas uso de tu derecho ,les recriminarles su actitud o le pidas su identificación, o caigas en su provocación ,etc.Se inventan denuncias falsa y estás fastidiado ya que prevalece lo que ellos digan.Incluso te pueden sacar puntos del carnet de conducir con toda impunidad.
En este caso estamos muy desamparados y pueden hacer un abuso de su autoridad, sin que el ciudadano pueda defenderse y aunque haya testigos, no los reconocen como tales.
¡En fin….! Estamos fastidiados.
16/11/16 at 12:48 pm
Completamente de acuerdo, esto fue antes de que naciera mi hijo hoy mi niño tiene casi dos años, y afortunadamente no lo perdí pero el estado en el que me dejaron los dos policías locales de Zaragoza fue de ansiedad y sufrí estrés postraumático. Escribí al justicia de Aragón y por lo menos él consiguió el número de placa. Mi reflexión posterior es igual que la tuya Ramón, me sentí muy desamparada y presa fácil de sus abusos de autoridad. Me sentí muy pequeñita, denigrada y humillada por dos tipos que tenían una pistola y que eran superiores a mí…así me lo hicieron saber a base de humillaciones infundadas. Fue una pesadilla que quedó en que el Ayuntamiento deZaragoza ante la duda daba la razón a estos dos envalentonados policías…Yo que no tengo experiencia en manejar conflictos de ningún tipo…me quedé sin que se hiciese justicia.
Un abrazo
29/06/15 at 2:37 pm
En Zaragoza están creciendo las quejas por abusos de la policía local. Yo sospecho que les obligan a un cupo de multas y que es muy demasiado acusar sin pruebas a un ciudadano de que no lleva el cinturón o de que está hablando por el móvil. Es tu palabra contra la de ellos, que suelen ser dos y encima uno cubre al otro. La indefensión ciudadana es impropia de un estado democrático de derecho.
24/10/15 at 6:15 pm
No puedo decdir que el comportamiento del agente municipal haya sido incorrecto en la forma, pero aun así creo que en el fondo se trata de un caso de abuso de autoridad. Exigirme llevar a los perros (tengo dos) atados (que es como iban, y como siempre van) y con bozal, cuando se trata de dos perros muy tranquilos y bien ensañados, cruce de pastor alemán alemán y husky,de talla media, que nunca causan molesta ni altercado, ni con otros perros, ni menos aún con personas, es sin duda un abuso de autoridad. Cuando le contesté, de buenas maneras, que no se trataba de perros de raza agresiva y que ningún perro (que yo haya visto en esta población de más de 10.000 habitantes), ni aún los de raza agresiva, iba con bozal en la población, me dijo que él me lo había pedido con buenas formas y que le mostrase mi DNI. No lo hice y seguí mi camino. Afortunadamente me dejó partir.
Que un agente de la autoridad local se comporte de forma tan arbitraria, intentando aplicar las leyes o las normas según su albedrío, con claro agravio comparativo, es … A diario pasan delante de ese agente gran número de perros de razas consideradas peligrosas y es evidente que él no actua. Tan solo hay un joven, en esta población, que lleva a su perro, un American Staffordshire Terrier, con bozal.
A pesar de que mis perros no pertecen a mninguna de las razas consideradas peligrosas, establecidas en el Decreto 90/2002, Artículo 1, ni concurren ninguna de las circunstancias de ninguno de los Artículos señalados en el Capitulo 1, sino que entran claramente en la definición del Artículo 2 como animales domésticos de compañia.
Sólo en el Artículo12, apartado 5, se habla de que los «perrosobjeto de la presente regulación…» en referencia clara a los perros de razas consideradas peligrosas.
No tengo intención de acudir al Ayuntamiento, como de hecho me gustaría, a presentar una queja de la actuación de agente, por motivos que el lector, estoy seguro, puede imaginar.
19/05/16 at 10:50 pm
Efectivamente, suelen marcar más las malas o peores experiencias, discriminando abruptamente las buenas, así es desgraciadamente. Pero cuando el perfil de un empleo o servicio, obliga a mantener y cuidar las formas, precisamente por lo delicado de la situación, estas situaciones son imperdonables. Justifica si no, que un avión se estrelle y fallezcan decenas de personas por el hecho de que todos somos humanos, no es viable pero si injusto, ya que hay profesiones que si permiten estas «aclaraciones o justificaciones» y otras no. El caso de la autoridad, no da da cabida estos «permisos» que se toman algunos.
2/11/16 at 4:56 pm
Este tipo de personas por llamarlas asi,abusan de tener una placa y es como si ellos fueran la ley.Cuando hace uno de sus compañeros algo mal o una barrabasada encima lo secundan.Tienen derecho a mentir ,para hacerte pasar por el haro,maltratarte y golpearte.¡pero que hace la justicia para protejernos! No se nos dice desde pequeños que los poderes ejecutivo,legislativo y judicial esta divididos;de que tenemos derecho de expresion de que no pueden golpearnos ni abusar de nosotros y lo mas grave ¡que todos somos iguales ante la ley!….con esto queda todo dicho un gran silencio dice mas verdades que un monton de necedades ,el ciudadano como siempre indefenso. A mi tambien me paso…
16/11/16 at 12:53 pm
Completamente de acuerdo, así me sentí yo. Además embarazada y con un miedo espantoso a que le pasara algo a mi bebé. Escribí hasta al justicia de Aragón, no podía entender porque había sido tratada tan injustamente…Me quedé con que por lo menos al Justicia le dieron alguna explicación y el número de placa pero nadie me pidió disculpas y nadie me quitó la multa que no me merecía. Yo en mi caso es que creo, que cuando vieron que se habían equivocado, en vez de pedirme perdón por una acusación falsa se vinieron arriba para que dejara de argumentar y para que les tuviera miedo… Habían seguido a una persona que el móvil lo tenía en un bolso y la estaban denunciando primero por hablar y luego al ver que no había llamada ninguna…por manipular un móvil (a ver como compruebo yo eso) yo que no tenía ni wassap…Así que me agredieron verbalmente y me trataron como si fuera una basura… con eso me quedé. Ufff hoy vuelvo a desahogarme que injusto fue todo!!!
2/11/16 at 5:07 pm
Que den clases de etica y moral hasta que aprendan a comportarse,nadie tiene que aguantar a un adulto.Algun dia ya que se creen superiores tendran situaciones que se les escapen de las manos porque no se puede ir asi por la vida.Yo en mi caso no confio en este cuerpo policial,se lo han ganado a pulso y me dan miedo.
8/02/18 at 5:58 pm
Yo sin ir mas lejos he cometido una infracción conduciendo un Giro indebido , por error por que la policía estaba en donde realice el giro. los vi además y de haberlo sabido no lo habría hecho, aun así asumo mi falta pero llega el policía gritando y chillando de malas maneras … 3 veces le dije que no era un delincuente y que por favor dejase de hablarme mal , para que al final me dijera estas denunciado ya te llegara a casa y venga TIRA ! … Obviamente no se identifico , así que estoy a la espera de recibir la multa para así con el numero de agente denunciante interponer una queja formal en mi ayuntamiento contra esta persona. Ojala hubiera una ley y/o algún organismo que persiguiera a estos profesionales que ensucian el nombre y el trabajo de otros compañeros que si hacen bien su deber .